
En 1813 abandonó Lucca y comenzó a hacer giras por Italia, donde su forma de interpretar atrajo la atención de quienes le escuchaban. En 1828 fue a Viena, más tarde a París y en 1831 a Londres. En París conoció al pianista y compositor húngaro Franz Liszt, que, fascinado por su técnica, desarrolló un correlato pianístico inspirado en lo que Paganini había hecho con el violín. Renunció a las giras en 1834. Su técnica asombraba tanto al público de la época que llegaron a pensar que existía algún influjo diabólico sobre él. Podía interpretar obras de gran dificultad únicamente con una de las cuatro cuerdas de violín (retirando primero las otras tres, de manera que éstas no se rompieran durante su actuación), y continuar tocando a dos o tres voces, de forma que parecían varios los violines que sonaban. Esto indica lo cercano que estaba su arte al mundo del espectáculo. Sus obras incluyen veinticuatro caprichos para violín solo (1801-1807), seis conciertos y varias sonatas.


En 1804 regresa a Génova y empieza una vida dedicada al intenso estudio del violín. En 1805 la hermana de Napoleón, Ana María Bonaparte, princesa de Lucca, lo nombró director de su música privada y de la orquesta de la Ópera, en este puesto permaneció tres años y posteriormente reanudó sus giras con gran éxito.Paganini ejecutaba el violín de una manera perturbadora. Su estilo brillante y, en ocasiones, efectista, desarrolló de manera considerable las posibilidades técnicas del violín, explorando diversos recursos como las triples cuerdas, glissandi, pizzicati y arpegios, explotados en sus propias composiciones. Los músicos como él quedaban impresionados, y la gente del pueblo no comprendía su virtuosismo, así que comenzó a inventar leyendas alrededor de él. Se decía que Paganini era hijo de una bruja y del diablo, incluso que él mismo era el diablo. Cuando algunas personas le veían corrían para no estar cerca de él; otras se le acercaban para tocarlo y convencerse que era un ser humano. Paganini, molesto por tantas calumnias, en 1831 publicó una carta en la revista parisina Gaceta Musical. Uno de los párrafos rezaba así: “No he asesinado a nadie ni he pasado ocho años en la cárcel, ni el demonio impulsa mi brazo cuando ejecuto.

¡Callad ya, por Dios, lenguas viperinas!”
Paganini se convirtió en su propio empresario, de esta manera recorrió casi todos los países de Europa: Italia, Austria, Alemania, Polonia, Francia, Inglaterra. De 1828 a 1831 radicó en París, donde su talento fue muy apreciado. En 1839 Paganini va a Marsella en busca de la cura para la tuberculosis laríngea que padecía. Más tarde se trasladó a Niza, y un día como hoy de mayo de 1840, muere.
Paganini se convirtió en su propio empresario, de esta manera recorrió casi todos los países de Europa: Italia, Austria, Alemania, Polonia, Francia, Inglaterra. De 1828 a 1831 radicó en París, donde su talento fue muy apreciado. En 1839 Paganini va a Marsella en busca de la cura para la tuberculosis laríngea que padecía. Más tarde se trasladó a Niza, y un día como hoy de mayo de 1840, muere.
3 comentarios:
Adolfo, Paganini y su música gloriosa, un placer para los oídos!
Paganini modificó el antiguo modo de tocar el violín y su "innovadora técnica" es la que actualmente tiene plena vigencia entre los intérpretes del violín e instrumentos de cuerdas de orquesta.
¿Sabes que a los 8 años mi padre me obsequió tres "cassettes musicales", interpretados por Accardo, un virtuoso intérprete contemporáneo? Aún recuerdo cómo me conmoví al escuchar esas composiciones por primera vez.
Jamás me cansé de oír esos cassettes; hasta que, de tanto hacerlo, terminaron rayados...
:(
Me gustó leer este artículo :)
siiiiii a mi me fascina Paganini... hay que remarcar que cuando el tocaba se decía que le diablo tocaba el violín ...
Gracias por tu visita
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